Este jueves, con una importante presencia de ATE, el sector de Enfermería nuevamente encabezó una movilización junto a trabajadores municipales y vecinos en general para exigir mejoras salariales.

La caminata partió desde el Hospital Municipal San José y culminó en el Palacio Municipal, donde los manifestantes ingresaron a la sesión del Honorable Concejo Deliberante para hacer uso de la banca abierta y participativa.

La enfermera Lidia Chávez fue la encargada de expresar el malestar del sector ante los concejales. “No venimos por ningún partido político, somos trabajadores y trabajadoras municipales. Venimos a decirles que estamos cansados de que nos roben la dignidad”, sostuvo.

En su intervención, destacó la grave situación económica que atraviesan: “Una enfermera cobra entre 360 mil y 560 mil pesos, muchas veces sin recursos para llegar al trabajo. Estamos expuestos a enfermarnos, incluso a terminar como pacientes del mismo hospital en el que trabajamos”.

Chávez también denunció la falta de diálogo con el Ejecutivo y advirtió sobre las consecuencias de reclamar: “Ante el reclamo, se responde con intimidación e injurias, como si fuéramos delincuentes”. Cuestionó además la falta de acompañamiento político y social: “El salario no es un lujo, es un derecho. Nos enorgullece la belleza de Campana, pero ¿a costa de qué? A costa de mirar a un costado mientras el sudor de los trabajadores es ignorado”.