Una persona en estado de ebriedad protagonizó un violento accidente que dejó, por suerte, milagro o lo que fuera, solo daños materiales.

Ocurrió este fin de semana, en la Av. Irigoyen. Precisamente frente al complejo de fiestas allí ubicado, cerca de la medianoche transitaba un Renault Sandero rojo, con una persona mayor al volante.

Primero, impactó con un VW Gol estacionado, el cual terminó arriba de la vereda. Al maniobrar, el Renault se cruzó de carril y golpea a otro auto estacionado. Al intentar recuperar la dirección, finalmente colisionó de frente contra un VW Vento.

Increíblemente no hubo heridos. Testigos aseguran que el automovilista pidió perdón de manera “errática”, pero dejó ver algunas botellas en el interior del vehículo. Bomberos y Policía se hicieron presentes en el lugar.